En la visita de los Reyes de España a
Plasencia, en el mes de marzo de 1977, el alcalde de la ciudad don Juan
Francisco Serrano Pino, tenía preparado un discurso de bienvenida que fue
censurado por las autoridades gubernativas.
Gracias a personas que nos pasaron este
discurso, hoy podemos saber lo que reivindicaba nuestro alcalde para el norte
de Extremadura.
DISCURSO CENSURADO DE JUAN FRANCISCO
SERRANO PINO A LOS REYES DE ESPAÑA – 1977 – 03 – 10
“MAJESTADES ¡Bienvenidos a esta bendita
tierra extremeña! Bienvenidos una vez más a nuestra Plasencia. En pleno Camino
de la Plata, formando parte de la Ruta de los Conquistadores y como cabeza de
la Diócesis de la Hispanidad, Plasencia se alza altiva y señera y, a la vez,
parece se deja recostar y acariciar por las sierras que la envuelvan y cobijan.
La ciudad que fundara Alfonso VIII; para placer de Dios y de los hombres >>, se presenta como una
fantasía, como un sobresalto. Como una fantasía hecha piedra y como un
sobresalto ante tanta historia, ante tantos recuerdos que hablan de conquistas
y hazañas proclamándola de;" MUY NOBLE, MUY LEAL Y MUY
BENÉFICA".
¡Majestades! ¡Bienvenidos a Plasencia!
En nombre de esta ciudad que hoy tenéis
junto a Vos, gracias por vuestra visita.
Quiero que conozcáis profundamente,
Señor, no sólo nuestras inquietudes y necesidades, sino las justas voces de la
Comunidad Placentina que reclama igualdad de oportunidades para el desarrollo
integral de nuestra dignidad humana, el conocimiento más próximo de la verdad y
el más claro y justo ejercicio de nuestras libertades.
Por todo ello, Señor, nos vais a
permitir que destaquemos la transcendental importancia que para Plasencia y
toda Extremadura tiene vuestra presencia entre nosotros, las fundadas esperanzas
que depositamos en vuestra persona y la fé que tenemos en la Corona
personificada en nuestro Rey en la ejecutividad del Gobierno y bajo el signo de
la política distributiva.
La Corona encarnada en Vos, Señor,
representa la unidad absoluta y total de los hombres y las tierras de la España
peninsular e insular. Con vuestra presencia nos traéis la fé y la esperanza
renacidas de esta sufrida y olvidada Extremadura que reafirma su inquebrantable
lealtad a la Corona: la lealtad de unos hombres sufridos como nadie y más
fieles y agradecidos que nadie.
¡Extremadura, Señor, es una región de
contraste!
Más de 41.000 Km. cuadrados de tierra extremeña y
solo dos provincias, que unidas son mayor que las regiones gallegas, la
catalana, la levantina ó la vasca. Mayor también, Señor, que Bélgica, Holanda,
Suiza, Luxemburgo, Dinamarca, Albania e Israel.
En la Región extremeña, Señor, existen
distancias similares a las Madrid a Valencia ó de Valencia a Barcelona; y
núcleos de población más cercanos a Madrid, Sevilla, Ávila y Salamanca que a
las propias capitales de provincia.
¡Extremadura, Señor es una Región de
contrastes!
El número de habitantes por provincias,
Badajoz se encuentra entre las doce primeras y Cáceres entre las veintidós
primeras, y son el “farolillo rojo” en la renta per cápita.
Sin embargo, Extremadura tiene:
-
solo dos provincias
-
solo dos representantes del Gobierno
-
solo dos delegaciones de cada Ministerio
-
solo dos Diputaciones provinciales,
y Extremadura tendrá en las futuras
Cortes solo dos representantes correspondientes a dos provincias.
¡Extremadura, Región de contraste!
La provincia de Cáceres tiene
actualmente 3.700 Km. de carreteras: 1.900 estatales y 1.800 de la Diputación
provincial. Sin embargo, ninguna otra provincia entre las españolas suma hoy
tantos Kilómetros de costa. A Plasencia se la denomina “Ciudad de los lagos”.
La mano del hombre ha hecho posible que la provincia cacereña, tan alejada
del mar, sea en estos momentos la que más kilómetros de litoral posea: 1.600
kilómetros forman las orillas de sus embalses, presas o pantanos. La mayoría
son productores de energía eléctrica, y teniendo en cuenta la que produzcan las
centrales nucleares en construcción, resulta que Cáceres será una de las
primeras provincias en producción de energía eléctrica.
A pesar de ello, no existe ninguna red
de ferrocarril electrificada, y las provincias extremeñas son posiblemente las
más bajas en consumo eléctrico.
¡Extremadura, Señor, ¡es una Región de
contraste!
Producimos el 70% del tabaco nacional
y, sin embargo, no existe en nuestro suelo ni una sola fábrica de elaboración
de cigarrillos.
¿Cabe más contraste?
En la Región existen más de cincuenta
mil millones de pesetas de ahorro privado depositado en las diferentes
entidades bancarias, y más del 60% de este ahorro está invertido fuera de
Extremadura.
Si mis datos son exactos, las Cajas de
Ahorros extremeñas tienen invertido en el INI una cantidad aproximada de dos
mil millones de pesetas y, sin embargo, el INI está inédito en Cáceres.
¡No hay duda, Señor, de que Extremadura
es una Región de contrastes!
Nuestra tierra da uno de los mayores
índices nacionales de emigración al extranjero ó a otras regiones más
privilegiadas de España.
Los extremeños, Señor, es sangrante
decirlo, “no tienen libertad de residencia”. Tienen que ir allí donde
encuentren el trabajo y el pan para los suyos.
La inflación está acarreando enormes
males en todas las regiones subdesarrolladas y, de manera especial, en nuestra
tierra.
Observamos con tristeza como los
medianos y pequeños labradores de nuestros pueblos, que constituyen la mayoría
de la población extremeña, pierden la ilusión por el ahorro que tantos
sacrificios les cuesta y tan pocos beneficios les reporta, por la constante
pérdida del valor adquisitivo del dinero.
Juan Fco. Serrano Pino |
Señor, sabemos que en vuestras manos no
está el resolver de un solo golpe tantos y tantos problemas que nos aquejan
desde siempre; pero con la mayor de las esperanzas os depositamos nuestro
programa de necesidades más apremiantes.
Os rogamos lo hagáis llegar a vuestro
Gobierno para que en Extremadura también puedan hacerse realidad las palabras
del primer mensaje de la Corona:
“Igualdad sin privilegios y justicia
distributiva para todas las regiones de España”.
Con esta ilusión, con esta fe, con la
renovada esperanza que nos da vuestra presencia, en la lengua de Cervantes, de
López, de Azorín, de nuestro inolvidable Gabriel y Galán y Pedro de Lorenzo, en
la lengua castellana, orgullo del pasado, presente y futuro de España, que
hablan más de 200 millones de hombres, con la nobleza y lealtad extremeña por
delante,
¡PLACENTINOS! ¡VIVA EXTREMADURA! ¡VIVAN
LOS REYES DE ESPAÑA! ¡VIVA ESPAÑA!”.
Juan Francisco Serrano Pino, fue
alcalde de Plasencia en el año 1968, tras la muerte de Julián Burgos. Durante
su mandato se realizaron en nuestra ciudad el Hospital de Plasencia, hoy Virgen
del Puerto. La presa del Jerte pues estaba obsesionado con el abastecimiento de
aguas y no podía concebir que tuviésemos escasez de agua teniendo un río aquí,
el hospital Psiquiátrico o la ciudad deportiva después de construir el pabellón
de la Data. Además, creó tres guarderías infantiles para 225 niños que fueron pioneras
en la región, y construyó más de 1000 viviendas sociales. Y dentro de la
infraestructura consiguió la carretera Navalmoral-Plasencia-Portugal. Compró
la Torre de Lucia. Termino su mandato en 1978, para dejar paso a Antonio Martín Majadas.
José Antonio Pajuelo Jiménez – Pedro Luna reina
“CREANDO CULTURA”.
1 comentario:
Pues seguimos igual o peor....a pesar de tener muchos más representantes en las Cortes.
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